
En el tren de los muertos
Si tuviera que buscar una definición para esta obra de Mireya Keller, diría simplemente que es la novela de las cosas entrañables. De esas que componen las historias que permanecen quietas en el rescoldo del alma, hasta que algo o alguien nos empuja a buscarlas como única manera de reencuentro con nosotros mismos. Esas historias que, como su autora lo dice, deben ser contadas, para que no se vayan ni se arrinconen ni cambien ni se borren ni terminen pareciéndose a los muebles viejos o a las casas vacías.
Mabel Pagano