Producción literaria > Poesía

Reemplazos

La vieja alfombra por un piso de madera
viene un parquetista, levanta, arranca, pone brea
y pega los listones nuevos
después lo sella con laca
Ella se mira al espejo y se cambia la ropa en el cuerpo de otra
y el invierno transforma el río sucio en escarcha estancada
La calle no tiene ojos para mirarse, la ropa envejece sin darse cuenta
y hasta se deja tirar o resucita en una feria americana
donde las chicas combinan rayas y flores con las uñas negras
y sonríen
como si nunca fueran a agrietarse los dedos, el esmalte
o la mirada
como si no existiera la gangrena
en la góndola de la carne vencida
Mientras tanto un bicho taladro perfora la madera del piso,
recién colocado
y asoma su saciada ignorancia por los agujeros
esos que se comen a la mina del espejo
que se mira con furia
y se cambia la ropa en el cuerpo de otra